jueves, 16 de febrero de 2012

Step by step

 
El 14 de febrero, como tantas otras fechas universales pre-establecidas, no va conmigo. ¿El cambio de imagen radical+"operacional" de Fernández de la Vega? Bueno, la verdad es que podría dar para escribir unas cuantas líneas. La reforma laboral, como una reconoce sus limitadas capacidades, prefiero dejarla para los análisis más concienzudos y profundos de Solera y Encinar. El caso es que, entre unas situaciones y otras, se me iba pasando el mes de febrero sin escribir nada en mi blog.
Sin embargo, por desgracia, ha llegado uno de los hechos que no puedo dejar pasar. Quizá sea algo friki para algunos, pero lo cierto es que la desaparición de Whitney Houston me ha producido una profunda emoción. Sus canciones y sus películas nos han acompañado durante bastante tiempo a quienes hemos rebasado la psicológicamente aterradora barrera de los 30. Y sí, reconozco que en mi adolescencia fui al cine a ver "El guardaespaldas", esa malísima película con una de las parejas más atractivas y con menos química de la historia del cine. Y sí, reconozco que me compré su banda sonora. Y también que canto en la ducha, como malamente puedo, ese "I will always love you". Y, evidentemente, que la voz de Whitney, limpia y transparente como pocas, no tiene igual ni en Mariah, ni en Celine ni en Adele. Ninguna suena como Whitney.
En la cocina de mi casa tengo un viejo radiocasete que todavía funciona. Sí, habéis leído bien, un radiocasete. Funciona bastante aceptablemente aún y, dado su estado, no me preocupa lo más mínimo si le salpica mi excelente sofrito o le alcanza la mostaza al abrir el sobrecito. Podéis intuir, pues, que también conservo, aunque guardadas de mala manera en cajas superfashion de Ikea, las cintas (¡¡musicasetes!!) de la época. Por eso siempre tengo en la cocina algunas de mis cintas para escucharlas cuando no me interesa lo que dicen en la radio. De esta manera, casi como Cate Blanchet en "Bandits", puedo cantar y bailar entre pucheros. Y las cintas que tengo ahora seleccionadas para escuchar allí son "Entre el cielo y el suelo" de Mecano, "True blue" de Madonna y "I'm your baby tonight" de Whitney Houston (por cierto, he logrado cierto grado de perfección en la interpretación y coreografía del temazo “My name is not Susan”). Un viaje a la nostalgia y al pasado, como podéis comprobar, sin los miedos que parece tenerle Pilar Rubio a la prehistoria personal.
El bombardeo de imágenes y noticias sobre la muerte de Whitney Houston me ha empujado a sacar, ya en CD, otras de sus canciones, como la banda sonora de “The Preacher´s Wife” (otra fallida película, con Denzel Washington en esta ocasión) en la que hay un tema firmado por Annie Lennox titulado “STEP BY STEP”. Es triste escucharlo ahora, visto lo visto, prestando atención a su letra. Estos días he sido testigo de comentarios sobre esta noticia (no en la televisión ni en la radio, sino en boca de amigos y conocidos de mi círculo) que me han dolido un poco porque junto a la expresión de tristeza por su muerte añadían una connotación de “ella se lo buscó”. Es increíble lo fácil que nos resulta situarnos por encima de los demás, pensar que a nosotros nunca nos va a pasar lo que a los otros porque pensamos que tenemos el control absoluto sobre nuestras vidas. Pues, siento decíroslo amigos, eso no es así. Hubo una época en la que Whitney era la número uno y una de las mejores (eso lo seguirá siendo para siempre). Hubo un tiempo en el que se atrevía a cantar “I won´t let my spirit fail me, I won´t let my spirit go until I get to my destination, … don´t let the bad things get to you”. Sin embargo después llegó otro tiempo, y “the bad things” la alcanzaron y la arrastraron. Lo que hizo, de acuerdo, no es lo correcto. Pero ¿podemos ponernos a salvo de la fragilidad? ¿podemos evitar que el corazón nos lleve a determinados sitios? Tengamos todos cuidado, no vaya a ser que finalmente nuestros juicios de valor y las piedras que arrojamos tan alegremente nos alcancen de lleno a nosotros mismos.


1 comentario:

  1. Puf, yo no he cruzado los 30 (aunque poco me falta, este año cumpliré 29) y también me impactó. A los que tenemos cierta edad, se nos clavó en la memoria para siempre. Yo también me he dedicado a escuchar música de Whitney estos días y el tema que más me impacta por el contenido es "One moment in time". De hecho, lo elegí para homenajearla en mi muro de Facebook. Imagino que lo conoces, pero te lo paso: http://www.youtube.com/watch?v=Oa9SolEg8wo

    Un saludo :)

    Vengatriz-www.abajolasopos.wordpress.com

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